El caso es que tenía que presumir de ellas. Fueron el regalo para mi hija mayor, que las vio parecidas, se le antojaron y llevaba un año pidiéndome que le hiciera unas. Y sí. Aunque algunas tienen una pinta "superapetitosa", son de fieltro:
Debo decir que la idea la tomé de Internet, como todo, pero no venían patrones, sino que las hice yo por mi cuenta.
Ésta fue mi primera magdalena:
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